Es importante tener claro que las políticas contables son los lineamientos que determinan los reconocimientos, las mediciones y las revelaciones de los Estados Financieros de una entidad, determinadas conforme a las prácticas y a las características de cada negocio, las cuales permiten tener una estructura organizada para toma de decisiones adecuadas; para el caso de las estimaciones contables, recordemos que, son supuestos o juicios utilizados al aplicar una política contable, debido a la incertidumbre sobre una partida que no pueda medirse con precisión (NIC 8.5 y sección 10 NIIF para las PYMES), estas, determinadas bajo criterios de acuerdo a nuevos acontecimientos, por ejemplo, la medición residual de la propiedad, planta y equipo, los impuestos anticipados, perdidas en contratos, provisiones con el fin de cubrir garantías o reducir existencias y cuentas por cobrar a su valor estimado de realización.
Teniendo en cuenta lo anterior, es importante señalar que la información financiera preparada durante el período de esta emergencia puede generar indicios de deterioro de activos, afectaciones al negocio en marcha, cesación de pagos a terceros, reinvención e inversión en canales de comercialización, e incremento de costos y pasivos laborales, por lo cual los juicios y estimaciones deben hacerse con conciencia de las perspectivas futuras y las afectaciones derivadas de la contingencia. Esto, bajo el entendido de la inestabilidad de la economía y el mercado actual, por lo cual, en el momento no sería suficiente preparar esta información basados únicamente en la historia de la Entidad.
Por ende, una vez determinados los ajustes a realizar se debe considerar que cada cambio tiene un tratamiento y dependerá de las características su efecto en la información financiera; es así que los cambios en políticas contables por efectos de ajustes en mediciones que permitan un mejor nivel de revelación de la información financiera, se aplicaran de forma retroactiva como si este hubiera aplicado siempre, afectando el último período comparativo, por otra parte, si el ajuste es referente a una estimación contable, se debe contemplar el porqué de dicho cambio, es decir, si este es por efecto de nueva información relacionada con incertidumbres futuras o materializadas, la afectación será prospectiva, más si es un cambio en la estimación que hubiese podido realizar anteriormente y se hubiese conocido se debe tratar como un error generando una reexpresión de cifras y se deberá revelar su afectación, plasmando la evidencia en la que se basa el preparador de la información financiera pues estos cambios podrán impactar significativamente la información a presentar.
Así mismo, se pueden presentar nuevos reconocimientos, que generarían cambios en las políticas contables, como pueden ser las ayudas que otorga el gobierno, como los subsidios de nómina y prima, en este caso, la política es prospectiva, además de transitoria.
Para concluir, podemos decir entonces que es fundamental que las organizaciones realicen análisis y evaluaciones oportunas, que permitan determinar y aplicar los ajustes en las estimaciones y/o políticas contables en sus Estados Financieros, con el fin de revelar la información de forma adecuada y confiable, optimizar los recursos y anticipar efectos mediante decisiones acertadas.
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